Hola. Quiero dejaros hoy la crítica que un compañero vuestro ha escrito en su blog personal sobre el magnífico libro El diario de Ana Frank: http://susodapedra.blogspot.com/2011/04/la-casa-de-atras.html y de paso felicitarle por el trabajo que está realizando (¡felicidades Jesús, sigue así!)
Estoy bastante de acuerdo con los razonamientos que plantea en el artículo. Sorprende la madurez con la que puede llegar a escribir una niña de 12 años aunque, como muy bien apunta vuestro compañero, es muy posible que las notas originales fueran corregidas (primero revisadas por esa niña que quería ser escritora; luego por su padre, que cortó diversos pasajes, sobre todo los referidos a la sexualidad de la adolescente y aquéllos en los que la madre salía más mal parada; más tarde quizá por editores).
Pero sobre todo estoy de acuerdo con el párrafo final: esperemos que actos tan horribles como los narrados en el diario (la persecución y el oprobio por pertenecer a una etnia o religión, por ideología o por orientación sexual, etc.), y que desgraciadamente aún acontecen en diversas partes del planeta, desaparezcan y nunca se vuelvan a repetir.
Por la red circulan diversos artículos que "destapan la verdad" de la historia de Ana Frank en favor de intereses antisemitistas y xenófobos, llegando incluso a negar la existencia de los campos de concentración... mejor no hacerles mucho caso... Quien quiera que haya escrito El diario de Ana Frank, expresó el sentimiento de miles de personas perseguidas por la sinrazón.
Os animo a todos los alumnos del Taller de Lectura a que, como ha hecho vuestro compañero, compartáis vuestras lecturas con todos nosotros.
Estoy bastante de acuerdo con los razonamientos que plantea en el artículo. Sorprende la madurez con la que puede llegar a escribir una niña de 12 años aunque, como muy bien apunta vuestro compañero, es muy posible que las notas originales fueran corregidas (primero revisadas por esa niña que quería ser escritora; luego por su padre, que cortó diversos pasajes, sobre todo los referidos a la sexualidad de la adolescente y aquéllos en los que la madre salía más mal parada; más tarde quizá por editores).
Pero sobre todo estoy de acuerdo con el párrafo final: esperemos que actos tan horribles como los narrados en el diario (la persecución y el oprobio por pertenecer a una etnia o religión, por ideología o por orientación sexual, etc.), y que desgraciadamente aún acontecen en diversas partes del planeta, desaparezcan y nunca se vuelvan a repetir.
Por la red circulan diversos artículos que "destapan la verdad" de la historia de Ana Frank en favor de intereses antisemitistas y xenófobos, llegando incluso a negar la existencia de los campos de concentración... mejor no hacerles mucho caso... Quien quiera que haya escrito El diario de Ana Frank, expresó el sentimiento de miles de personas perseguidas por la sinrazón.
Os animo a todos los alumnos del Taller de Lectura a que, como ha hecho vuestro compañero, compartáis vuestras lecturas con todos nosotros.
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